Hacia mucho tiempo que una lágrima no recorría mi mejilla.

¿Alguna vez habéis soñado con una caída libre? Ese momento de no sentir nada, de sentirte completamente vacía.
Se parece mucho a cuando sientes que falta algo dentro de ti, que estás incompleta.
Muchas veces la música ayuda a rellenar ese vacío que sientes en tu interior.
No sabes si puede ser que tu corazón haya decidido darse a la fuga porque está cansado de aguantar a tíos que lo maltratan a su antojo.
O alomejor puede que haya sido tu hígado, que dice no poder aguantar ni una copa más de whisky que lleve marcado su nombre.
Por otro lado tenemos el cerebro, el que siempre nos mantiene cuerdos. El cabronazo que guarda en imágenes y palabras todos los momentos que te gustaría borrar de tu mente.
Ese sí que se podría ir, pero para no volver.
Y ya no sé si estoy soñando o qué.
Despiértame y arráncamelo todo. Para que al menos así no sea un pequeño vacío, si no un hueco completo.

First but not last.

No quiero móviles ni whatsapps ni internet ni mensajes.

Eso de tener que depender de si te ha hablado o no, si su foto de perfil ya no es la que os hicisteis aquel día o si su estado ya no es vuestra fecha.

Me repatea la "última conexión" y todo lo que ella conlleva. 

Quiero estar con ellas hasta el fin de mis días y que nos acabemos cansando de hacer todos los días lo mismo. Cada noche con uno y todas las mañanas con ellas.

Verdaderamente no quiero más, no pido más.

Me dan paz, me dan el amor y el cariño que necesito.

Hoy hace un año que hicimos el primero de muchos viajes increíbles juntas y espero verdaderamente que no cambie. Porque nos quedan muchas cosas por vivir. Nos queda mucha gente que conocer, gente que pasará, estacionará un tiempo y luego con las mismas se irá. Y yo lo sé, sé que las buenas vamos a estar. Hasta el final, porque no necesitamos más.

Habrá muchos hombres en nuetsras vidas, sí, eso está más que claro. Habrá muchos coches que rayar y muchas exnovias a las que tendremos que matar. Peor estaremos todas juntas para hacer que les piten los oídos y para que arrepientan de lo que dejaron pasar. Porque el hombre que desaproveche a una ellas, estará desaprovechando una estrella. No, mejor que una estrella, una galaxia.

Así que hoy solo pido que no se vayan, que se queden conmigo y no me abandonen nunca. Porque las necesito y sin ellas no podría haber llegado hasta donde estoy hoy. Les estaré eternamente agradecida cada día del resto de mi vida.