Maybe? We should.

¿Sabes cuándo escalas una montaña, cuando estas a punto de alcanzar la cima que estas tan confiado que das un paso estúpido y te caes? Pues eso es a lo que yo llamaría mi vida. Un vaivén de momentos de ahora o nunca.

Basta.

Basta.

Basta.

Se acabó. Para. No puedo seguir así. Taladrándome los oídos con música para no oír la realidad. Jodiéndome los pulmones para no pensar. Martirizándome pensando en el “que hubiera pasado si…”

Pero es que creo que no sé ser de otra manera. Que mal. Que desastre. Necesito alguien que me salve. Que me saque de este agujero.

Es que no entiendo nada, nada de nada absolutamente. ¿Qué hago? ¿Qué haces? ¿Qué pasa? ¿Por qué? ¿Por qué a mí? ¿Qué he hecho yo mal? Me gustaría saberlo. ¿Dónde estoy? ¿y por que aquí? ¿Por qué tu? ¿Por qué yo? ¿Por qué hubo un nosotros un día? No lo quiero. Bórralo. No quiero que vuelvas. No quiero volver a tener mi mente al descubierto. No quiero que nadie me vuelva a conocer. No quiero que me puedan volver a controlar.

Voy a intentar volver a escalar la montaña. No prometo nada.

Thanks

Y por primera vez después  de mucho tiempo he pensado en ti y he sonreído. He pasado por un lugar en el que estuvimos juntos, llevaba la misma chaqueta que ese día. Y recuerdo bien como me cogías fuerte de la mano, para que no me perdiera entre la multitud. Me acuerdo de los fuegos artificiales. He sonreído por lo segura que me sentí estando contigo en ese momento. He sonreído porque te sigo queriendo. He sonreído porque te echo de menos. He sonreído porque desde que no estoy contigo no soy igual de feliz. He sonreído porque me alegro de que seas feliz, de que te vaya tan bien todo. De que hayas encontrado a alguien que te llene más de lo que hice yo.

Y llego a casa y solo quiero escribir. Se ha convertido en mi piti de después de comer. En esa necesidad momentánea que te corroe por dentro, y una vez la sacias te quedas a gusto. Y ya no necesitas más. Hasta que vuelva a surgir un momento.

Espero algún día encontrar a alguien que me llene tanto como lo hiciste tu. Que me haga ser tan feliz como me lo hiciste ser tú. Que me haga ser tan yo como lo hiciste tú.

Hoy he sonreído, y ha sido gracias a ti.

Thanks.

Tequila.

Hoy no quería levantarme de la cama. No porque tuviera más sueño, que podría haberme pasado el día durmiendo, sino porque simplemente ya no hay nada ahi fuera que llame mi atención como para salir de mi cama.
Tengo miedo. Mucho miedo. Tal miedo no me deja vivir tranquila ni bien. Ya no disfruto las cosas, por miedo.
¿Y miedo a qué? Serás miedica de mierda. Todo el día ahi haciendo el gilipollas, temblando por el miedo que te corroe. Levantate ya joder, deja de hacer el gilipollas. Echale un par de huevos a la vida. Enfréntate a tus miedos, véncelos. No dejes que manejen tu vida.

Y lo que me quitaría ese miedo serías tú diciendome esas palabras de aliento. Con un beso de despedida. Amargo, agridulce. Como tú.

Rayos y centellas

Y te acabas sintiendo sucia, utilizada. Fuiste su necesidad, y tu ilusa de mierda como siempre te creíste importante. No, no y no. Es que siempre igual. No aprendes de tus errores. Ni se te ocurra buscar a ningún culpable que no seas tú misma. Que gilipollez.

Ya te aburre todo esto. Siempre son los mismos fallos, vuelves a la monotonía. No puedes salir de ella. Estas atrapada. Lo apuestas todo a una carta que sabes que es perdedora, intentas no ser pesimista por una vez en tu vida. Fallas. Otra vez. Como no podía ser de otra manera. Piensas que no estás hecha para acertar, que ese no es el plan que tiene la vida para ti. Que alomejor no estás en el lugar adecuado.

Te acabas dejando llevar, para no ir a ningún lado. Nada te gusta. Nada te llena. Pierdes las ganas. Pierdes la emoción. No quieres. Nada.

Bueno, en realidad sí que quiero. Quiero a ti. Quiero a estar contigo. Quiero que me quieras. Quiero ser tan importante para ti como tú lo eres para mí. Es mucho pedir. Demasiado.

Demasiado para cualquiera, no creas que es tu culpa. Creo que soy yo, que no estoy hecha para este tipo de cosas. Creo que soy más yo cuando estoy sola, cuando estoy metida en mi fango. 

Solo pido respirar

Silencio

Paz

Cocorotas.

Para querer a alguien primero tienes que quererte a ti mismo.
Tienes que amueblarte por dentro, poner en orden el desastre que dejó el anterior.
Yo no puedo sola. Lo he comprobado, soy un desastre total.
Alomejor puedo vivir en este desastre. Cada cosa en su sitio, y cada sitio en su cosa.
Hasta que encuentre a alguien que me ayude a ordenarlo, a poner cada cosa en su sitio. Pero a su manera.

Ahora, eso sí, si vas a empezar con la mudanza, no te quedes a medias. No quiero tu desastre más el mio.

Y que lo bueno compense lo malo. Siempre.

Las palabras se las lleva el viento. Que fácil es decir cualquier cosa, que dificíl es demostrar solo una.
Un día sí, al siguiente puede, y pasado mañana será que no. Y me quejo, sí claro que me quejo, me gusta quejarme.

Odio el amor. En realidad lo odio. Alomejor no el amor en sí, porque en el momento es lo mejor del mundo entero, y cuanto más dure mejor. O peor. Porque más duro será el golpe después. Siempre diremos el típico "pues él se lo pierde" o "en realidad no me gustaba" o el peor de todos "ya volverá suplicando volver, pero no pienso estar". MENTIRA, estarás. Alomejor te haces un poco de rogar pero se te van a caer las bragas, asi que más te vale ir asumiéndolo.
No odiría el amor si lo bueno compensara lo malo, y cuando llegue ese momento amaré el amor.

A veces hacerse la durita y la fuerte no compensa para nada. Acabas tú sola llorando en casa y teniendo como consejeros a tu almohada y alomejor a algún peluche de por ahí.

Yo solo digo que te dejes llevar. Que ya veremos. Que alomejor mañana encuentro al amor de mi vida y me enamoro del amor.

O quizás no.

Relieved.

Una noche cualquiera, en una calle cualquiera de Madrid, una chica bebe más de lo que debería. En ese momento empieza a decir todo lo que se le pasa por la cabeza a un muy buen amigo suyo. Al decir todas esas cosas se para a pensar que nunca habia tenido el valor de decirlo en alto, y ahora que se había escuchado a sí misma veía las cosas de otra manera.

Que mal ha hecho las cosas hasta ahora. Sus decisiones la han llevado siempre a malas situaciones, sitaciones en las que ella salía mal parada. Tiene el corazón tan destrozado que no sabe si se podrá reparar alguna vez. Espera que sí, porque ante todo no pierde la esperanza.

Sabe que han jugado con ella, que no la han tratado como debían. ¿O sí?. Eso es lo que decía aquel día, que alomejor es ella, es su forma de ser, es que no es lo suficientemente buena, no se comporta de manera adecuada. No lo sabe. No lo sabrá nunca. Pero es más fácil así, es más fácil encontrar a un culpable, nos sentimos aliviados.

Creas un hoyo tan hondo que ya no acuerdas donde empezó ni de como salir.

Sola en medio de una multitud de gente.

Temblar. Extraña sensación. De emoción, de miedo, de incertidumbre.

Me voy, me voy. Mi cuerpo se queda pero mi alma se va, se evapora. No quiero que nadie venga conmigo, los importantes están en mi cabeza. Siempre están y siempre estarán.

Odio que seas tan capaz de controlarme. Odio que cualquier persona me conozca tan bien como para desmontarme en un momento y dejarme hecha trizas. Por esto es por lo que no me abro nunca a las personas, por este miedo, que me hace temblar.

Me desnuda por dentro y tengo frío.

Little talks.

Hagamos locuras.

Comámonos el mundo de un bocado.

Saltemos de pico más alto de la más alta torre.

Viajemos sin importar donde.

Bebamos sin pensar en la resaca. 

Gritemos hasta reventarnos las cuerdas vocales.

Besémonos hasta quedarnos sin labios.

Abracémonos apretando tan fuerte que dejemos de respirar. 

Vamos a bailar hasta destrozar los zapatos.

Recorrámonos toda la ciudad sin parar.

Despiertame con un beso cada mañana.

Desgastemos las palabras.

Escribamos hasta que no quede más tinta.

Y que cuando no sea tu día, me encuentres para que yo sea la pequeña parte que intente alegrarlo. Que nos tengamos el uno al otro aunque caiga una bomba nuclear. 

Hacer las cosas díficiles fáciles, con solo mirar y sonreir. 

Upside down.

Fue el momento, fue lo que llevabas mucho tiempo esperando. Te decepcionó, yo me decepcione. No era lo que tú pensabas ni mucho menos. Tengo muchísimos defectos que se me ven a la legua, cosas que asustan. Me encariño con facilidad sin quererlo, siento demasiado por gente que no debería, soy una llorica y me rio por cosas sin sentido.

Me dijiste algo cuando empezó todo esto que ya me dio miedito: “pase lo que pase con esto, que sepas que eres increíble” y no me lo creí,  ni me lo sigo creyendo. Que te digan algo que suena mal es peor que te digan algo malo, cuando te dicen algo malo lo asimilas, es malo y punto, cuando te dicen algo que suena mal no sabes cómo tomártelo, obviamente depende de la persona, de lo que la conozcas, de la situación, el contexto… pero te deja igual de mal y rayada.

Así que aquí estoy, con un examen mañana y escribiendo. Como siempre, haciendo lo único que me hace sentir bien. Contigo había encontrado una pequeña parte de esa estabilidad que buscaba, de esa estabilidad que necesito para ser algo de mí misma. Entiendo que es una gran responsabilidad que nadie quiere cargar sus hombros. Ni yo misma quiero, y así estoy.

Y al final acabas haciendo cosas que no te gustan con tal de vivir un resquicio de felicidad, de esa sensación, de ese subidón… acabas sin reconocerte a ti misma, aunque, ¿lo hiciste alguna vez?

Yo que sé. Ya deliro. Ya está. Ya se acabó. Ya se han ido de año sabático mis neuronas, sin intención alguna de volver.

                                                                             

Never good enough.

Todo.

Explotar de felicidad,

quitarse un peso de encima,

componer cuando uno no se encuentra estable,

un beso en un mal momento,

un abrazo en el mejor,

estar en los bajones y en los subidones,

ayudar cuando haga falta y cuando no,

A veces quiero ser tu todo, otras me acobardo y me lo pienso. Alomejor no lo necesito. O a ti no te conviene. O ninguno de los dos lo quiere en realidad. 

Creo que le doy demasiado la vuelta a las cosas, mi cabeza esta en funcionamiento constantemente. Esto tiene una parte malisima, obviamente, y otra medio buena. Y cuando digo medio es porque no suelo apreciarla. 

Alomejor con una buena caña en la mano las cosas se ven de otra manera, a través del visor de una cámara, por la ventana, detrás del humo de un buen peta, mirando tu sonrisa.

Quizás necesitemos complicaciones para asumir responsabilidades

¿Dónde estarás esta noche?

Y vuelas.

 Buscas ese subidón, esa adrenalina que pocas cosas pueden darte. Y cuando la encuentras quieres más, no paras de pensar en ese subidón.

Alomejor la vida se trata de eso, de buscar un momento de subidón que te haga sentir como no te sientes diariamente. Alomejor una buena copa, alomejor un cigarrillo en el momento perfecto, alomejor un beso con mucha química, alomejor un orgasmo, alomejor una sonrisa... Cada uno con su subidón, con su pequeña dosis de adrenalina.

Algunos dirían que se trata de una adicción, como una pequeña droga sin la que no puedes vivir a gusto. Que genera dependencia y tolerancia, que cada vez necesitas más, que te acaban consumiendo, que se va tu vida con cada gramo que consumes, cada calada, cada trago... bla bla bla

Puede que sea así, pero conozco a poca gente que se haya muerto por adicción a tus besos.

Y vuelas.

Que llueva, que llueva

La virgen de la cueva.

Lluvia tras la ventana.

Que se pare el tiempo mientras estemos juntos. Que la Tierra deje de girar durante unas horas para poder abrazarnos, de verdad, durante unos momentos sin pensar. Me gusta no pensar, que mi cabecita loca se pare.
Me gustan tus besos, tus palabras, lo bien que me haces sentir cuando estoy contigo. Me gustan tus ojos, tu sonrisa, tu voz...
No se cómo lo haces, pero cuando me miras mi mundo es mejor, los problemas se van, la gente no importa, consigues sacar una sonrisa.
Me encanta llegar a casa y seguir oliendo a ti.
Sin embargo, frente a todo esto que es insuperable, hay un gran bache. Que seguramente no lo sea, que seguramente haya sido mi cabecita pensante que esta insoportable últimamente, es por tu culpa así que no lo pagues con ella.

Carne fresca.

Y con la entrada anterior constato que empieza mi cambio, empieza mi búsqueda, empieza mi vida.

Espero que salgas de mi cabeza para conseguirlo.

No lo dudo.

Cada día.

Te echo de menos, a diario. Cada día que pasa te echo más de menos, cada día que pasa me gustaría mas que estuvieras conmigo. Cada día me arrepiento mas de mi gran error, cada día me doy mas cuenta de lo estúpida que pude llegar a ser.
Y es que aunque que quiera no puedo, todo me recuerda a ti; las calles, los bancos, los restaurantes, los autobuses,... cada lugar en el que estuve contigo me recuerda a ti, y cada vez que eso pasa en vez de sonreir por los buenos momentos, no puedo hacer otra cosa más que hundirme en mi miseria.
¿Por qué no soy lo suficientemente buena? Antes decías ser feliz, decías estar enamorado de mí, decías que lo era todo para ti, que estabas vacío sin mí, y cada día lo creo menos.
Me defraudas, me defraudo a mí misma por ser tan absolutamente incrédula para creerte, pero parecía tan real, nuestro pequeño mundo era tan real.

Y ahora estoy perdida, me siento sola. Te echo de menos.
Echo de menos tus besos.
Echo de menos tus abrazos
Echo de menos tus caricias.
Echo de menos tus comentarios nocivos con buena intención.
Echo de menos tu sonrisa, tu risa.
Echo de menos tus días malos en los que yo estaba para arreglarlos.
Echo de menos tus sorpresas.


Te echo de menos.

Irremediablemente estás en mi mente.

Tengo miedo.

Me dan miedo las avispas

los cangrejos

el sufrimiento

caer sin paracaídas

...

Me da miedo la vida, 

sé que suena raro.

Normalmente la gente tendría miedo a la muerte

aunque a mí eso no me entra en la cabeza.

No sabes lo que te alberga la vida,

sí, tiene muchas cosas buenas, pero muchas más malas. 

La muerte es un vacío que no acaba

no hay cosas malas

no hay dolor

no hay sufrimiento

sólo tranquilidad

Sin embargo, tú, vida, me aterras.

Jager

Vuelves a caer, te desangras por las heridas, se vuelven a abrir.

Te hundes

Te cansas

Lloras

Gritas

Te cagas en la puta madre de todo

Él te hace sentir así. Desgraciadamente acabas dependiendo. No quieres. No puedes evitarlo.

Deliras

Joder

...

Te caes y no te quieres levantar

Dormir y no volver a despertar

Down

Caes de la nube en la que estabas y en un momento te estampas contra el suelo, te rompes en mil pedazos, te esparces por el suelo. No quieres recomponerte.
Se vive mejor asi, se vive mejor en la soledad, sin explicaciones, sin problemas, sin rayadas. Tú y sólo tú. Nadie que te pueda doler.

Sácame de aquí.

Magia

Lágrimas tontas. Lágrimas sin autor. Lágrimas sin destinatario ni remitente.
Te despiertas un día por la mañana y todo marcha sobre ruedas, hasta que te encuentras a tí misma sin ningú tipo de apetito y sentada en el suelo de tu baño llorando sin poder parar, y te asustas.
Joder, ¿qué me está pasando? No lo sabes. Sientes que nadie puede saberlo. No sabes como arreglarlo.
Necesitas estabilidad.
Se busca estabilidad en forma de persona.

Anteayer

21-11-11        19:46

Se esconde tras una coraza. Puede que no quiera que nadie vea lo que hay dentro. Puede que le asuste que a nadie le guste lo que pueda encontrar.
Puede que se sienta mas segura tras ella, con mas ganas de afrontar la vida, con mas ganas de un nuevo dia.
Puede que esa coraza sea su via de escape, la que le ayude a evadirse de los problemas, la que le ayude a no tener que afrontarse a ellos.
Puede que sea una coraza que se ha ido formando a lo largo de su vida debido a las dificultades que le ha planteado la misma; y que ya, es imposible de arrancar.